EL HÁBITO INCANSABLE DE CREAR
Hace algunos años Juliano Mazzuchini decidió emigrar desde su Brasil natal hacia Buenos Aires, Argentina.
En su trayectoria creativa, otras expresiones artísticas ligadas al arte dramático implantaron en el artista la necesidad de generar una puesta en escena ante cada comienzo de una de sus obras. Este hábito se entrelaza con el ritual y nos acerca al instante en que enfrentarse al lienzo en blanco es dejar salir a su propio yo.
CUANDO TENEMOS EL PRIVILEGIO DE PERMANECER COMO ESPÍAS INVISIBLES ANTE EL ACTO DE LA CREACIÓN, ES INEVITABLE SORPRENDERNOS ANTE CADA DECISIÓN QUE TOMA EL ARTISTA.
MIRAR LA PALETA DE JULIANO MAZZUCHINI ES PRÁCTICAMENTE UNA INTROMISIÓN A SU FLUJO CREATIVO, QUE NOS MARAVILLA AL OBSERVAR.
EN ALGÚN CÉNTRICO SUBSUELO DE BUENOS AIRES, DENTRO DE SU LABORATORIO PICTÓRICO, MAZZUCHINI NOS HACE PARTE DEL COMIENZO DE UNA DE SUS INQUIETANTES OBRAS, DANDO LOS PRIMEROS PASOS CON PINTURA, SALTÁNDOSE EL DIBUJO, ABRIENDO SU ORDENADOR COMO MODELO Y SIMPLEMENTE PERMITIÉNDONOS SER PARTE DEL RITO.
DISFRUTA FORMAR PARTE DEL UNIVERSO DE JULIANO MAZZUCHINI EN BLAST GALLERY.
El artista oriundo de Brasil, Juliano Mazzuchini, comparte sus procesos pictóricos en dos videos de su taller en Buenos Aires.
En esta primera entrega nos invita a ser parte del proceso inicial de una de sus obras, haciéndonos testigos de la inmediatez con que arranca sus pinturas, libres de bocetos anteriores, apropiándose de la silueta en un acto de automatismo que en su desarrollo, se vuelve un gesto casi hipnótico.